Nos encontramos ante uno de los libros de religión que, si fuera una película del siglo XX, entraría en la denominación de "road movie". Porque lo que nos narra es el viaje que realiza un peregrino a lo largo de Rusia en el siglo XIX y las circunstancias por las que pasa durante el trayecto del mismo.
Me ha gustado. El gran protagonista no es el peregrino ruso que sirve de hilo narrativo, sino que es la enseñanza de un tipo de oración concreta, una técnica de orar, la "oración del corazón", o la "oración de Jesús". Es una oración corta, sencilla y que habría que estar repitiendo siempre, en todo momento, incluso dormidos. Por supuesto, el libro nos narra que esto último, el repetirla durante el sueño sólo lo han logrado los grandes ascetas y santos.
Es un libro asequible de leer. Aunque es un libro religioso, también se pueden vislumbrar pinceladas de la cultura eslava del siglo XIX. Permite conocer también el pensamiento cristiano ortodoxo.
En resumen, es un libro que enriquece en muchos sentidos. Claro está, si llegas a él sin ningún tipo de prejuicio.