He puesto como autor a William Walker Atkinson, pues es él el que lo publica a principios del siglo XX, pero la autoría no se manifiesta de forma clara, en consonancia con los principios herméticos, los cuales están desvelados solamente a los iniciados. Tres de estos iniciados quieren compartir con el mundo ciertos principios que servirán a aquellos que los sepan aprovechar bien.
Es un libro interesante. Mezcla de religión, filosofía y ética. Se lee bastante bien, y cuando acabas te das cuenta que los principios a los que hace referencia son los comunes a todo el pensamiento filantrópico que tanto se extendió durante el siglo XIX, por no hablar que también beben de las distintas normativas de comportamiento que podemos apreciar en todas las religiones.
En fin, un intento de poner la "ciencia" (entre comillas) por encima de la religión, y que se queda en ética disfrazada de ciencia. A pesar de ello, se pueden sacar enseñanzas para el comportamiento humano.